Alma compañera
Un alma compañera es exactamente eso, una compañera del alma. El alma es algo distinto al cuerpo de fuego blanco, el núcleo de fuego blanco de tu Presencia YO SOY. Por eso el término «alma compañera» se refiere a un servicio y una misión en el Sendero que podrías realizar con alguien aparte de tu llama gemela.
La definición del alma compañera describe a alguien con quien estás trabajando para llevar a cabo un proyecto que forma parte de los requisitos que debes cumplir para la maestría sobre uno de los siete chakras. En específico, tu alma compañera sería aquella con la que estás trabajando para concentrar las energías de Alfa y Omega en un chakra en particular; y juntas emitís vuestras energías para componer la totalidad de ese chakra.
Cuando uno encuentra a una persona con la que encaja bien para lograr un trabajo noble, es importante comprender que, aun cuando la relación fuera de almas compañeras, ello no quiere decir que se trate de un fíat automático de la vida o del destino para que haya una relación romántica. Uno puede terminar el proyecto y con ello estar listo para la siguiente iniciación en el siguiente chakra, la cual conlleva un grupo de personas totalmente nuevo y quizá otra alma compañera.
La conexión entre almas compañeras permite muy buenas relaciones entre hermano y hermana, buenas relaciones familiares y buenos matrimonios. Estas relaciones tiene una cualidad que refleja al alma, cierto elemento en el que uno se siente completo. De hecho, uno podría mucho más parecido a su alma compañera que a su llama gemela. Mientras que uno sería lo opuesto a su llama gemela, con respecto a su alma compañera encontraría un paralelismo. Ello produce relaciones felices, armoniosas y fructíferas.
Uno de los mayores logros de todos los tiempos lo realizó una pareja que no estaba formada por llamas gemelas, sino cuyas respectivas llamas gemelas estaban ascendidas y, por tanto, tenían la capacidad de ayudar a la pareja en su misión. María y José, designados por Dios para traer al mundo al Cristo, recibieron la ayuda de las alturas del Arcángel Rafael, el complemento divino de María, y de la amada Porcia, la Diosa de la Justicia, complemento de Saint Germain (que estaba encarnado como José).
Su vida es la prueba viviente del hecho de que las almas que vienen juntas dedicadas al servicio a Dios y a traer al mundo al Divino Varón pueden tener éxito con la ayuda de sus llamas gemelas. Esta ayuda, cuando se invoca, siempre está disponible de la Presencia Divina de sus llamas gemelas, aunque estas aún no hayan ascendido.
Véase también
Para más información
Elizabeth Clare Prophet, Soul Mates and Twin Flames: The Spiritual Dimension of Love and Relationships.
Mark L. Prophet and Elizabeth Clare Prophet, The Path to Attainment, chapter 1, “Twin Rays.”
Sources
Mark L. Prophet and Elizabeth Clare Prophet, The Path to Attainment, chapter 1, “Twin Rays.”