Diosa de la Luz
Amerisis es un ser poderoso que anima la cualidad de la luz, de ahí su nombre, Diosa de la Luz. El término Dios o Diosa denota a alguien que es un ser cósmico y que da alma a la conciencia de Dios, a la de su cargo en la jerarquía espiritual y la de su rayo.
La devoción de la Diosa de la Luz es por la luz de Dios, así como por la luz de Dios en usted. Ella almacena esa luz por nosotros en el corazón de cada átomo, célula y electrón. Una vez explicó: «Me llaman, por la gracia de Dios, la Diosa de la Luz simplemente porque he prometido alianza a la luz durante tanto tiempo»Cite error: Invalid <ref>
tag; refs with no name must have content.
Trabaja con la Reina de la Luz y la Diosa de la Pureza. La Trinidad de estas diosas derramará su luz a través de usted cuando les rece y haga sus decretos y fíats. Incluso el sencillo mantra «¡Hágase la luz!» bastará.
Her embodiment
Antes de ascender, cuando estaba encarnada en Suramérica, la Diosa de la Luz había alcanzado un logro tal que era capaz de mantener con vida el cuerpo durante más de quinientos años. En un momento de distracción, su campo de fuerza fue violado por un grupo de magos negros que esperaban al acecho, esperando poder comprometerla. Pusieron sobre la mitad inferior de su cuerpo la cola de un pez, aprisionándola como una sirena.
Debido a su gran logro, no le fue posible abandonar ese cuerpo físico y renacer. La Ley exigía que ascendiera desde la forma en la que había logrado su maestría. Por tanto, afrontó la exigencia de conservar la vida en aquella forma durante más de ochocientos años antes de que se le concediera la ascensión.
Durante trescientos años prestó servicio a su prójimo desde detrás de un mostrador, llevando faldas largas para que nadie se diera cuenta de lo que había ocurrido. Ella ha dicho que desde aquel momento, miró siempre hacia arriba, hacia la luz, y nunca volvió a poner su atención en la matriz negativa (su forma de sirena). Cuando su impulso de luz fue lo suficientemente grande, la Hermandad envió a un emisario no ascendido que era la clave de su libertad. Juntos produjeron el necesario equilibrio e impulso de fuego sagrado como para romper la matriz que ella había llevado durante tres siglos. Poco después ascendió.
Lecciones para el camino
En 1966 la Diosa de la Luz explicó por qué había sido vulnerable al mago negro que quería producir su destrucción:
En un momento de descuido, me estaba congratulando por todos mis logros cuando él atacó con la picadura y el mordisco de una víbora, y yo me encontré cautiva y apenas capaz de recuperar el uso de mis miembros superiores. Pero el instructor espiritual que vigilaba por mí pudo salvarme de esa destrucción.
Llamé y llamé y llamé a Dios a lo largo de los años para que me liberara de ese cautiverio. Y mis llamadas siempre fueron hacia la luz: «Oh luz, libérame. Oh luz, libérame. Oh luz de Dios, libérame. Oh luz de Dios, libérame».
Mientras servía a la humanidad, mientras prestaba servicio a la gente y a los hombres, la oración constante de mis labios era hacia la luz. «¡Luz, luz, luz, expándete! ¡Luz, expándete! ¡Luz, expándete! ¡Luz, expándete, expándete, expándete!». Y esta orden Divina llegó a tener un crescendo en su impulso que, al fin, como el golpe de un relámpago atravesando el azul, llegó el edicto del Consejo Kármico. Y se produjo un gran terremoto y un temblor en mí; y de repente, las escamas del cautiverio se abrieron y vi la nueva carne y el perfecto cuerpo que una vez conocí, restaurado por la luz en el reino de la oportunidad divina y en el punto en el que de nuevo podía retomar mis estudios sobre la gracia divina justo donde los había dejado, pero de la forma más humilde y decidida, pues jamás volvería a someterme a ninguna forma de cautiverio.
Y así, mantuve mi aplicación a la luz hasta que, finalmente, el gran Consejo Kármico me llamó y me dijo que, en verdad, debido a la luz que había exteriorizado, era digna de ser llamada, digna del apelativo Diosa de la Luz. En una maravilla repentina y casi ciega, avancé para aceptar, no por mí ni por el título (noble como era y noble como aún es), sino para poder transmitir a la humanidad a lo largo de los siglos mi don de luz y así ayudar no sólo a los hombres, sino incluso a las huestes angélicas, a exteriorizar una luz mayor a lo largo de los rugientes siglos y hacia la eterna inmensidad de la luz sin límites de Dios»23.Cite error: Invalid
<ref>
tag; refs with no name must have content
Su servicio hoy
Amerisis dice:
Os doy mi luz y mi cuerpo causal, y mis legiones están listas para servir. Recordad mi nombre, Amerisis, Diosa de la Luz. Y recordad llamarme y hacer el fíat de luz.
La luz, pues, es la clave alquímica para la curación de las naciones y también es la clave para vuestra continuada objetividad a medida que aprendéis el significado de la cruz de fuego blanco.
Soy una Madre de luz y estoy con vosotros. He estado donde vosotros estáis. He visto al Señor Sanat Kumara consumir la oscuridad. He visto victoria tras victoria. Nosotros también anhelamos el final de la era de oscuridad. Ha durado demasiado. Pero sus ciclos están determinados, amados míos, por los que están encarnados… El libre albedrío tiene un peso excepcional en los universos exterioresCite error: Invalid
<ref>
tag; refs with no name must have content.
En sus dictados, la Diosa de la Luz nos ha advertido repetidamente que estemos en guardia constantemente contra aquellos que desean usar nuestras debilidades para hacernos retroceder en el sendero espiritual. Ella ha desvelado que trabaja de cerca con Jesús. Jesús y ella con frecuencia envían luz a los moribundos y les ayudan a lidiar con el miedo a la muerte. Usted puede llamarla cuando alguien esté muriendo. «Os utilizaré como puntos focales en el mundo de la forma», dijo, «para expandir la luz para ellos, que es la luz de la esperanza, la luz de la fe y la luz de la caridad» para todos los que están transitando hacia las octavas superiores.Cite error: Invalid <ref>
tag; refs with no name must have content
Una meditación para aumentar la luz
Para aumentar la luz en nosotros, la Diosa de la Luz nos ha dado una meditación sobre la luz, y nos ha dicho:
Es bueno desarrollar una meditación en la luz en la que veáis puntitos de luz por todo el cuerpo. Visualizaos como un gigantesco árbol de Navidad con una vela en cada rama y cada ramita de forma que millones de velas puedan arder en vuestro árbol de la vida para iluminar el camino de millones de personas. Recordad que en cada punto de cada célula de vuestro cuerpo, hay un núcleo en el átomo y hay un sol central en cada célula. Se trata de puntos de luz. Son, como si dijéramos, manifestaciones del Special:MyLanguage/Great Central SunGran Sol Central en niveles microscópicos.
Vibrant health within the body helps to keep the light circulating. Thus, one may enjoy the vibrant mind that is quick and alert and the desire body that is truly aligned with the Law of God in the joy of the LORD.[1]
How to overcome character weaknesses
Amerissis has also given practical teaching on overcoming character weaknesses. She explained that each of us has three major recurring tests in our lives. She said:
Most people on earth, as we have calculated in surveys our angels have taken, have three knots in consciousness that hold them back, pull them back. These knots are so obvious, right beneath their noses, that they fail to see them year after year. Some pass from the screen of life in the change called death never having realized that they missed the most obvious—the most obvious of matters that they came into embodiment to correct.
Self-analysis is wise when it is not overdone. Therefore, seek those professionals who can assist you. Seek also counsel from your dearest friends, loved ones, family members. For they may also tell you what they may have observed....
Think then of the three strongest points in your lifestream, where you show the greatest strength of character—the honor, the nobility, the constancy, the stick-to-itiveness. Note this, because most people do have three points where they excel, and excel consistently....
You should always have three points of acceleration and attainment that you are working on and three points to eliminate, elements of character that you desire to put into the flame. If these are always with you, you will make constant progress. You will self-transcend yourselves many times over. And in the end when you arrive at the gate, you will find that you have passed so many tests that you have balanced karma and you are ready to be candidates for the ascension in one of the ascended masters’ retreats.[2]
Retreats
► Main article: Shrine of Glory
Amerissis uses the Queen of Light’s focus above Messina on the island of Sicily, the Goddess of Purity’s focus in Madagascar, and her own focus in the Shrine of Glory in the Andes in South America as anchoring points for a threefold distribution of the light throughout the world, especially Europe, Asia and Africa.
See also
Sources
Mark L. Prophet and Elizabeth Clare Prophet, The Masters and Their Retreats, s.v. “Amerissis.”